La extraña necesidad de 'reventar' a Navas
Miguel Ángel Chazarri 09/11/2020 |
Ha llamado mucho la atención la cuando menos extraña gestión de Lopetegui con Jesús Navas, que cayó ante Osasuna como perfectamente pudo hacerlo antes. Su lesión estaba cantada. Muchos minutos, esfuerzos explosivos, continuos gestos tocándose la zona, sus 34 años, partidos con el Sevilla y con España... Lopetegui ha decidido no guardarlo, no reservarlo lo más mínimo. Como afirmaba el gran Carlos Bilardo, si Navas no está fracturado, juega. Y así ha sido. Evidentemente la decisión ha puesto en riesgo al jugador, cuyo parte médico exacto se desconoce por el momento. En descarga del entrenador, normalmente cuando un peso pesado da el paso adelante y dice que juega, no hay freno posible. Es prácticamente imposible pararlo, entre otras cosas porque su importancia dentro del equipo está fuera de toda duda, obviamente.
Navas no ha podido descansar debido a que el Sevilla se ha metido en una espiral rara de resultados que aconsejaban su concurso. En plena depresión, prescindir del jugador que da carácter, de quien sube la pelota mil veces, del futbolista que da pases de gol... Mucho prescindir. Aunque curiosamente, por las piruetas del fútbol, la fea racha del 1 de 12 se rompió sin él en el campo, ya con Ocampos ocupando la banda derecha. Tampoco en Champions se ha podido despistar el equipo. El objetivo ha sido encarrilar cuanto antes el pase a octavos y para ello es necesario contar con los mejores elementos. Por supuesto, la cortedad de un futbolista que sustituya al palaciego con garantías también influye, sin duda. En este sentido, Lopetegui maneja tres vías para sustituirlo: la natural de Aleix Vidal, que no parece que la vaya a utilizar demasiado, desplazar a Koundé a la derecha para dar entrada a Sergi Gómez o Rekik, o jugar con tres centrles, con todo el carril para Ocampos.
Los fríos números avalan la acumulación de esfuerzos de Navas. El campeón del mundo ya suma 11 partidos en sus piernas, contando con la Supercopa de Europa. Ha dado dos pases de gol. Suma 288 pases buenos (un 44,1% por partido) y ha recuperado en Liga 43 balones (casi 7 de media). Se acerca ya a los mil minutos jugados (930') justo al inicio de noviembre. Teniendo en cuenta que también descansará en el próximo partido de Champions en Krasnodar (martes, 24 de noviembre a las 18.55 horas), ahorrándose el esfuerzo del choque y un largo viaje, si finalmente las pruebas médicas desvelan que no está roto y se ahorra los encuentros con España, el 'plan' habrá salido casi perfecto.