

1-0: Mestalla como espejo
![]() Lucas Haurie 11/04/2025 |
El Valencia no va a ninguna parte, o apenas a una permanencia holgada como el Sevilla, pero su estadio estalló extasiado cuando se sustanció la victoria sobre su sosia, ese grande-venido-a-menos que boquea pidiendo el final de la temporada. El mismo Mestalla que vituperada a Unai Emery cuando quedó tercero dos años seguidos festejó la victoria que sella la salvación en clara prueba de que, también en el fútbol, todo es relativo. Hasta echan cuentas con los puntos que los separan de la Conference League, pobres, cuando hace un par de meses se daban por descendidos. Al sevillismo, o sea, le queda un breve camino por recorrer y es en su propia cabeza: convencerse de que merece la pena ir a la Puerta de Jerez la próxima vez que quede séptimo, quizá dentro de siete u ocho lustros.
Exactamente igual que en los primeros 45 minutos contra el Atlético, la primera mitad frente al Valencia mostró lo que hoy es el Sevilla: estrictamente nadie, en lo futbolístico y en lo social. Un par de decisiones de Sánchez Martínez y su asistente de vídeo, ambas atinadas, habían impedido que el mejor juego de los visitantes se plasmase en el marcador, primero al revocar un penalti a Peque –que no era– y luego al anular un gol de Lokonga porque la pelota había salido en el córner de Lukebakio. El belga dejó un par de veces en ventaja a Isaac Romero, que sigue jugando al ritmo de Primera Federación y el encuentro al descanso estaba destinado a al 0-0.
El Valencia también se había acercado con peligro, sobre todo por esa banda de Carmona que es un caramelito para los rivales. Por allí incurrió Gayá para toparse con Nyland al rechazo de una acción en la que un despeje de emergencia de Badé se estrelló en el larguero. Eran dos grandes enfermitos, o sea, deseosos de que la Liga termine sin mayor daño. En el descuento de la primera parte, sin embargo, Isaac se dejó comer la tostada por enésima vez en lo que va de temporada al no aguantar el impacto de Foulquier. Sánchez Martínez dejó transcurrir la acción hasta mucho más allá del tercer minuto de descuento anunciado y Javi Guerra marcó un golazo. Da igual porque la campaña está liquidada, pero fue la enésima prueba de que al Sevilla ya no lo respeta nadie.
Nyland y Mamardashvili demostraron en el arranque del segundo periodo que están por encima de la mediocridad de sus respectivos equipos. El noruego infundió vida al Sevilla desviando al travesaño un disparo a bocajarro de Javi Guerra y el georgiano metió, firmísimo, la mano en un disparo de Lokonga desde la frontal. Eran los cinco primeros de la reanudación y los argumentos ofensivos de los dos equipos prometían un espectáculo que, al final, no se produjo. Todo el segundo tiempo, en efecto, fue un largo languidecer hasta el final sin fútbol ni ocasiones, apenas con la emoción que brindaba un resultado corto que ni el Valencia buscó ampliar ni el Sevilla estuvo en condiciones de equilibrar. En realidad, faltaba tensión porque ambos sabían que nada se juegan hasta agosto, más allá de la honrilla de no terminar pegado a la zona comprometida.
Ficha técnica:
Valencia CF (1): Mamardashvili, Foulquier, Mosquera, Tárrega, Gayà, Barrenechea, Javi Guerra (Diakhaby, minuto 86), Diego López (Rafa Mir, minuto 73), Luis Rioja (Fran Pérez, minuto 86), Almeida (Pepelu, minuto 73) y Sadiq (Hugo Duro, minuto 58).
Sevilla FC (0): Nyland, Carmona (Juanlu, minuto 78), Badé, Gudelj (Pedrosa, minuto 78), Kike Salas, Agoumé, Lokonga (Saúl, minuto 65), Sow, Lukébakio, Isaac Romero (Idumbo, minuto 65) y Peque (Ejuke, minuto 65).
Goles: 1-0, minuto 45+3: Javi Guerra.
Árbitro: Sánchez Martínez, murciano. Amarillas para Javi Guerra, Kike Salas, Carmona, Foulquier y Gayá.