Sangante, el objetivo que queda apuntado para una defensa en el alambre
Miguel Ángel Chazarri 04/02/2025 |
El mercado invernal del Sevilla ha dejado más ruido que satisfacción, como viene siendo la norma en los últimos tiempos. Uno de los objetivos que no se ha podido rematar ante la falta de más salidas es el del central Arouna Sangante, que finalmente no ha salido del Le Havre.
Pese a que el valor del futbolista, según Transfermarkt, es de 10 millones de euros, el Sevilla sabe que su precio el próximo verano será menor. En torno a los 5 millones. Un posible descenso del conjunto francés rebajaría su precio ante las evidentes apreturas. El Le Havre va último con 14 puntos, a 6 de la salvación y a 4 del puesto de promoción por la permanencia. Lo tiene cada vez más difícil.
El fichaje de Sangante hubiera sido posible con una o dos salidas sonadas, caso de Suso y la muy improbable de Marcao, con contrato hasta 2027. En el momento que no ha sido posible ni una ni la otra, el club decidió parar tras el gasto de 8 millones de euros en Vargas (2,5) y Akor Adams (5,5). Ambas operaciones fueron posibles gracias a la venta en verano de Ocampos y a la reciente de Montiel a River (4,5 millones de euros).
La realidad es que el Sevilla asume un gran riesgo en la defensa. El centro se queda justísimo. Y el lateral izquierdo, tres cuartos de lo mismo, con sólo un integrante específico, Pedrosa, más Kike Salas. Es cierto que sólo hay una competición y que ganando cuatro o cinco partidos la tranquilidad será un hecho.
El Sevilla, tras el mercado invernal, ha reducido efectivos en vista de que la economía aprieta. Aunque el coste total de la plantilla se sigue acercando a los 100 millones, realmente en el campo se compite con la mitad, ya que los cedidos Gattoni, Joan Jordán, Rafa Mir y Januzaj cuestan 20 millones. Más dos suplentes que hasta el momento apenas cuentan para García Pimienta, caso de Suso, Marcao, y el lesionado Nianzou, que ocupan 30 millones. Así que la frase popular de 'el dinero en el campo' no es posible en el Sevilla. Como siempre, los resultados definirán si la política de la dirección deportiva ha sido acertada o no.