1-1: Tristísimo alegrón
Lucas Haurie 11/01/2025 |
No habría merecido el Sevilla FC perder ante el colista, como parecía que iba a suceder cuando se decretaron cuatro minutos de descuento, y es un magro consuelo salvar un puntito ante el colista. Pero la realidad es la que es, y la derrota habría agrandado las dudas (más que razonables) que suscita este proyecto (¿?) zozobrante hasta las lindes mismas de la tragedia, aunque resulta que la primera vuelta se ha zanjado con una puntuación mediocre e incluso pésima para los estándares recientes de este club pero, esto es lo que hay, satisfactoria para la cera que arde. Que llegue ya el verano.
La primera mitad fue un pestiño infame. García Pimienta alineó a cuatro mediocentros con la esperanza, quizá, de que brotase algo de fútbol de ese manantial yermo que es el Sevilla. Una sobredosis de centrocampismo en toda regla fue lo que logró el técnico catalán, a quien ni Agoumé ni Lokonga ni Sow ni Saúl, todos los refuerzos para la zona de la factoría Orta, regalaron ni un mísero pase potable en tres cuartos de hora de puro bostezo. Extrañó la posición del ilicitano, de falso extremo izquierdo, conformando una collera inoperante con Kike Salas, al que le estallaban las costuras cada vez que lo encaraba Luis Rioja.
Así, lo poco que generaban los locales era gracias a Lukebakio en la derecha y, sobre todo, a un Isaac consciente de que merodeando por las cercanías del belga podía cantar bingo: lo intentó el lebrijano, que se mataba a correr, con un zurdazo desde treinta metros que halló fantástica respuesta en la manopla derecha de Mamardashvili. Fue la primera ocasión de una primera parte con dos oportunidades, ya que la segunda la fabricó Dodi con un precioso pase interior a Saúl que el internacional remató a las nubes. El plan de los dos entrenadores aterrados era no equivocarse y rezar por el chiflido de una flauta. O, más bien, cruzar los dedos para que se equivocase el otro.
El error, en cadena, fue de la defensa del Sevilla a pesar del prometedor inicio del segundo tiempo, en el que los locales apretaban y obligaron, en tiro lejano de Lukebakio, a que Mamardashvili se luciese por segunda vez. Pero un saque largo del georgiano cuando más sufría su equipo fue peinado por Hugo Duro, que le ganó el salto a Badé y Carmona, dos defensas al mismo balón (primer y segundo fallos), y cedió a Rioja, a quien Gudelj dejó progresar por su perfil más hábil (tercer fallo) hasta las mismas barbas de Nyland, que se volvió translúcido en el tiro del cabecense por su palo (cuarto fallo). García Pimienta, para intentar la remontada, activó a Juanlu e hizo debutar a Vargas en el sitio de Carmona y Agoumé.
A medida que transcurrían los minutos, el resultado iba horadando la frágil moral de los locales, al que le anulaban el empate de Lukebakio por un fuera de juego milimétrico de Saúl y rozaban la igualada con un tiro estupendo de Vargas que se estrelló en el palo. García Pimienta agotó los cambios por desesperación, metiendo a Peque no se sabe a qué y a Pedrosa para darle profundidad a una banda roma con Kike Salas. El lateral zurdo catalán, a falta de un par de minutos para que se consumase la tragedia, enganchó un tiro lejano cuyo bote insidioso despistó a Mamardashvili, héroe toda la noche y villano en la última jugada. Si se trata de encontrar a tres peores, este Valencia cortito y desgraciado es uno de ellos.
FICHA TÉCNICA:
Sevilla FC (1): Nyland, Carmona (Vargas, minuto 68), Badé, Gudelj, Kike Salas (Pedrosa, minuto 78), Agoumé (Juanlu, minuto 68), Lokonga, Sow (Idumbo, minuto 78), Lukebakio, Saúl (Peque, minuto 85) e Isaac Romero.
Valencia CF (1): Mamardashvili, Foulquier, Mosquera, Tárrega, Gayà (Yarek, minuto 68), Barrenechea (Jesús Vázquez, minuto 93), Javi Guerra, Diego López (Canós, minuto 68), Rioja, Almeida (Pepelu, minuto 78) y Hugo Duro (Sadiq, minuto 68).
Goles: 0-1, minuto 60: Luis Rioja. 1-1, minuto 92: Pedrosa.
Árbitro: Hernández Maeso, colegio extremeño. Amarillas para Foulquier, Sow y Sadiq.