Un plan a tres años para salir del agujero

Miguel Ángel Chazarri 19/11/2024

El Sevilla se encuentra en una situación delicadísima, únicamente paliada porque los equipos de abajo, de momento, no ganan nunca. De la situación societaria no ha quedado todo dicho, ni mucho menos. Quedan muchas incógnitas por resolver. Mientras, el club ha ideado un plan a tres años para sacar la cabeza a flote y comenzar a enderezar el rumbo deportivo, lo más importante de todo.

Con el nuevo director general, José González-Dans, como elemento importante del cambio, las líneas maestras marcadas por el exdirigente del Deportivo de La Coruña pasan por tres objetivos. El primero, obtener la suficiente liquidez, algo que con el préstamo de 108 millones recientemente firmado queda garantizado. El Sevilla paga y no tendrá problemas en ese sentido, sabiendo que los préstamos hay que devolverlos con el interés correspondiente.

El segundo pilar es el de la reorganización de la entidad. Todo ha estado bastante desmesurado en gastos en los últimos años. El coste de la plantilla en el verano de 2023 ascendió a 203 millones de euros. El plantel envejeció. No menos cierto es que con tal política se ha entrado en Champions con la gorra y se han levantado títulos europeos. Pero el Sevilla seguirá metiendo la tijera allá donde pueda. No hay más remedio.

El tercero radica en la sostenibilidad. Las bajadas de nivel en el fútbol suelen ser muy bruscas, ya que los compromisos adquiridos son millonarios. Cuando bajan los ingresos, toca seguir respondiendo. Lío asegurado. González-Dans tiene experiencia en el manejo de la crisis de otro grande como el Deportivo de La Coruña, ahora mismo desaparecido de la élite del fútbol nacional. Le tocó gestionar la caída de una entidad que reventó a base de éxitos fruto de la mala gestión.

Un déficit de 80 millones

El Sevilla presentará en la próxima Junta de Accionistas un déficit de 80 millones de euros, motivado por la rápida eliminación de Europa la pasada temporada. Estaba presupuestado alcanzar los octavos de la Champions. Ni siquiera cayó a la Europa League. Las malas clasificaciones ligueras también castigan. En las dos últimas campañas, un puesto 12º y un 14º. Al bajar tantos puestos, los ingresos por derechos de televisión han decrecido.

También penalizan los despidos millonarios de Tecatito, Idrissi y Papu Gómez, principalmente, además de otros cedidos que han seguido castigando las arcas. El club decidió cortar por lo sano con estos jugadores y ello tiene su coste, que quedará reflejado en el balance de la Junta que se celebrará a finales de diciembre.

Soluciones

No hay varitas mágicas. O el Sevilla vuelve a recuperar un buen funcionamiento en lo único que importa, el fútbol, o no generará grandes ingresos. La idea es fichar talento joven y barato -algo cada vez más complejo por el funcionamiento de todas las direcciones deportivas del mundo- y tirar de cantera para acortar todo lo que se pueda los tres años marcados para equilibrar la situación. También se piensa en el futuro Sánchez-Pizjuán como palanca para obtener ingresos extraordinarios, aunque todavía queda un largo trecho hasta que la misma se active. Sigue habiendo mucho escepticismo con respecto a la construcción del campo nuevo.

González-Dans pasa a ser uno de los miembros principales de la reorganización del Sevilla. También el director deportivo, Víctor Orta, en quien se sigue confiando plenamente. Se tienen en cuenta sus desaciertos, pero pesa más que en un verano haya rebajado a casi la mitad el coste de la plantilla (de los mencionados 203 millones a 109) y que el Sevilla sea ahora el cuarto equipo con el plantel más joven de España. En el próximo mercado invernal pasará un nuevo examen. Se cuenta con algo de dinero y se fichará con total seguridad.