1-0: El suicidio de Agoumé
Lucas Haurie 09/11/2024 |
¿Quién demonios es tan osado como para acometer el fichaje de Lucien Agoumé? ¿Por qué Xavi García Pimienta expresa, cada vez que le preguntan, su entusiasmo con este jugador? ¿Cómo es posible que los técnicos de la selección francesa sub-21 lo hayan citado para las dos últimas ventanas? La única forma de que el Leganés, el paupérrimo Leganés, metiese un gol era regalárselo. Pues eso hizo el Sevilla, su demencial mediocentro, a falta de diez minutos para un 0-0 de libro en Butarque: permitió que Cissé se le echase encima, cedió mal a su portero que, pese a todo, llegaba con ventaja para despejar y agarró a su rival para ganarse el doble castigo de penalti con roja directa. Miguel transformó y dejó los puntos en Butarque.
Para revitalizar a su mortecino ataque, García Pimienta alineó a dos delanteros, ambos inéditos ante la portería, aunque no varió su esquema predilecto de 4-3-3 porque Iheanacho partía desde el extremo izquierdo. En la defensa, Gudelj supliló al incompetente Marcao, lo que liberó un puesto en el centro del campo para Agoumé, pivote con Sow y Lokomga como interiores. Total, que el sevillista se sentaba ante el televisor con la certeza de que sólo Lukebakio tenía capacidad para desequilibrar a la defensa del Leganés, que gustoso le cedió la pelota a su huésped. Fuera de eso, lo que se generase a balón parado, con un par de peinadas en la primera parte que desnudaron los conocidos apuros de Dmitrovic en los balones cruzados.
La primera parte, así, fue un genuino pestiño durante el que el Sevilla dio una exhibición de posesión inane mientras que los pepineros, incapaces de generar nada, al menos sí amenazaron con dos disparos de sendos conocidos de la afición sevillana: un tiro raso del exbético Juan Cruz que repelió difícilmente Álvaro Fernández y una falta directa aviesa del exsevillista Munir que lamió el palo y gracias, porque el portero riojano hizo la estatua. El (improbable) espectador neutral se aburrió como una ostra; quienes anhelaban una victoria de su respectivo equipo, tirios o troyanos, se debatían seguro entre la desazón y la esperanza de que el otro se equivocase antes.
El signo del tedio marcaba también a fuego el segundo periodo, hasta que Agoumé cometió su error circense, más cómico que trágico. La jugada ha quedado descrita en el primer párrafo pero no su único efecto positivo: no jugará por sanción en la próxima jornada, para alivio del sevillismo. ¿Se pueden presentar alegaciones a Competición para que le metan doce partidos de suspensión? Echará el lector de menos la descripción de alguna jugada de ataque del Sevilla: también la añora el cronista, pues ninguna hubo ni antes ni después del gol. El terceto de atacantes, con Peque que salió en los últimos minutos, ha pasado el tercio de la temporada sin marcar un solo gol. Ahí está el dato clave de la campaña sevillista: pocos años se le renovaron a García Pimienta, que lleva sumados quince puntazos con semejante tropa.
Ficha técnica:
Leganés (1): Dmitrovic; Altimira, Sergio González, Nastasic, Tapia (Chicco, minuto 76), Franquesa (Javi Hernández, minuto 67); Brasanac, Cissé (Roberto López, minuto 89), Munir; Juan Cruz (Óscar Rodríguez, minuto 76) y Miguel de la Fuente.
Sevilla FC (0): Álvaro Fernández, Carmona (Juanlu, minuto 88), Gudelj, Kike Salas, Pedrosa, Lokonga, Agoumé, Sow (Peque, minuto 88), Lukebakio, Iheanacho (Jesús Navas, minuto 73) e Isaac.
Gol: 1-0, minuto 82: De la Fuente, de penalti.
Árbitro: Pulido Santana (canario). Amarillas a Cissé, Sergio González y Gudelj. Roja a Agoumé.