Miguel Muñoz, Roque Olsen y García Pimienta: de Las Palmas al banquillo del Sevilla FC
José Antonio Jiménez 02/06/2024 |
El Sevilla FC ha hecho oficial el fichaje de Francisco Javier García Pimienta. El entrenador elegido por los rectores blancos para la reconstrucción de un equipo que, parafraseando a Alfonso Guerra, no lo reconocerá el curso que viene ni la madre que lo parió. Y es que son tantos los cambios que se avecinan en el vestuario blanco para la 2024/2025 que pocos serán los supervivientes a un ejercicio en el que el conjunto nervionense ha vuelto a jugar con fuego.
Curiosamente, García Pimienta es el tercer entrenador que desembarca en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán procedente de la UD Las Palmas. Con anterioridad, dieron el salto a la península Miguel Muñoz y Roque Olsen. El primero fue entrenador sevillista entre 1979 y 1981. Su pasado en el Real Madrid y sus buenos resultados en el Granada y en Las Palmas convencieron a unos gestores que tiraron de experiencia en los banquillos para pelear por una meta raramente alcanzada (la Copa de la UEFA).
Sin embargo, a la hora de la verdad, ni el juego ni los resultados sonrieron a un Miguel Muñoz que había convertido a Las Palmas en uno de los equipos que mejor fútbol practicaba de Primera (de la mano de Brindisi, Morete...). Una derrota casera ante el Hércules puso punto final a un ciclo con más oscuros que claros en diciembre de 1981.
El argentino Roque Olsen, por su parte, ejerció en dos etapas como entrenador del cuadro blanco (en la segunda, tras haber entrenado anteriormente a Las Palmas). En la primera, entre 1974 y 1976, fue clave en la vuelta del cuadro blanco a Primera división. En la segunda, ya en el crepúsculo de su carrera, no logró los resultados necesarios para clasificar a los sevillistas para disputar la Copa del UEFA. Corría la temporada 88/89, curso en el que antes se habían sentado en el banco nervionense Xabier Azkargorta y Pepe Ortega. A diferencia de Miguel Muñoz, anteponía la disciplina a la calidad de sus pupilos.
Ahora, turno de un García Pimienta que tiene por delante el difícil reto de un Sevilla austero y con muchas dudas a día de hoy en cuanto a planificación, con varios pesos pesados en la rampa de salida y sin unas arcas boyante para acudir al mercado de fichajes.