El Betis ha convertido la clásica mesa en añicos. Tuvo que superar muchas dificultades. Dos, principalmente. Al rival, un estupendo equipo, y al árbitro, Cuadra Fernández, que durante todo el encuentro fue a lo suyo: a cargarse un choque que realmente no tuvo nada. No fue nada bronco. El buen planteamiento de Pellegrini, las dosis de efectividad y ese segundo gol de Lo Celso nada más empezar la segunda parte fueron las claves para sumar los tres puntos. La expulsión del Chimy Ávila no hay por donde cogerla. Lejos de amilanar al Betis, todos los futbolistas ofrecieron su mejor versión, especialmente los centrales, máquinas de despejar centros.

Que el fútbol cambia en un segundo es algo ya mil veces visto. El minuto fatídico para el Betis llegó en el 33'. Chimy Ávila realizó una entrada aparatosa para cortar un avance de Baena, aún muy lejos de la portería de Vieites. Cuadra Fernández no se lo pensó. Que el árbitro enseñara la roja es comprensible. La estirada de la pierna del argentino, el gesto de dolor de Baena, por supuesto que el Chimy es el Chimy… Todo ok, aunque repasando las imágenes, VAR mediante, esa acción debió ser revisada. Puede que ni hubiera contacto. De haberlo, levísimo.

El plan de partido cambió. Hasta ese momento, los de Pellegrini supieron cortar las vías de peligro del Villarreal. Los dos jugadores determinantes en ataque para la construcción, Gerard Moreno y Baena, quedaron aislados. Apenas les llegaba un balón. Se quedaron fuera del encuentro gesticulando, reclamando balones que no caían por la presión arriba del Betis. Dando buenas sensaciones, aunque sin tirar mucho a puerta, llegó el gol de Vitor Roque en el minuto 32'. Todo se construía a partir de la valiente colocación del equipo y de los defectos de Bailly, incómodo en el perfil izquierdo.

Quedaba todo por delante, por supuesto, pero qué mejor que la ayuda de un segundo gol para dar un paso más hacia la victoria. Falta provocada por Vitor Roque y Lo Celso enseña su exquisita zurda en el 46'. El 0-2 cayó, incontestable. El Villarreal no se fue del partido. De hecho empató pronto (Baena, 54'), si bien tampoco su fútbol fluyó, aunque indudablemente tener a Thierno Barry en el área siempre supone un incordio. Con Cuadra Fernández liando la pajarraca en cada acción, y gracias al imperial trabajo de Sabaly, que salvó un gol en el minuto 58', y de los centrales, el Betis apuntaló un triunfo que definitivamente aleja la mala racha y acerca de nuevo los puestos europeos. Con uno menos desde 33', aguantando y aguantando los ataques amarillos... Esa victoria debe curtir para lo que venga. Con la recuperación de más futbolistas, todo debe ir a mejor.

Villareal CF (1): Luiz Junior, Kiko Femenía, Bailly (Juan Bernat, minuto 46), Albiol, Cardona; Parejo, Pape Gueye (Barry, minuto 57), Álex Baena, Ayoze, Yeremi Pino (Cabanes, minuto, minuto 69) y Gerard Moreno.

Real Betis (2): Fran Vieites; Sabaly, Diego Llorente, Bartra, Perraud; Johnny Cardoso, Altimira (Natan, minuto 88); Chimy Ávila, Lo Celso (Isco, minuto 74), Abde (Aitor Ruibal, minuto 74); Vitor Roque (Assane Diao, minuto 68).

Goles: 0-1, minuto 32: Vitor Roque. 0-2, minuto 47: Lo Celso. 1-2, minuto 54: Álex Baena.

Árbitro: Cuadra Fernández, balear. Roja para Chimy Ávila. Amarillas para Pape Gueye, Lo Celso, Manuel Pellegrini, Bakambu, Kiko Femenía, Aitor Ruibal, Álex Baena, Vitor Roque, Yeremi Pino y Parejo.