Así jugaron los futbolistas del Betis ante el Aris Limassol
Paco Cepeda 09/11/2023 |
Claudio Bravo (5): Una parada con muy probable lesión, además con Rui Silva en el dique seco. Sin grandes intervenciones, porque tampoco es que se necesitara de que fuera milagrero ni mucho menos, gobernó perfectamente el partido menos en ese gol en el que no salió de la mejor forma, aunque es verdad que el equipo estaba muy despistado tras el cambio de Pezzella y dejar a Guido y Marc Roca como centrales improvisados.
Aitor Ruibal (6): Gol de la tranquilidad que apagó el incendio que se estaba produciendo a nivel de juego en un Betis que salió dormido en la segunda mitad. Metió ese gol porque llega, es optimista y se encontró un portero de trapo.
Pezzella (5): Le llegaron varias veces en oleada los rivales y por momentos fue uno más de los que estaban muy endeblitos. No se le vio superior como en otros partidos, sin ser tampoco un desastre de encuentro. Su entrenador le dio descanso cuando vio todo hecho. Se notó más su ausencia que la presencia.
Marc Roca (7): Hiperacivo, el defensa más activo, con un par de errores groseros, que los tuvo, y aciertos suficientes para alcanzar el notable con gol incluido.
Abner (4): Apenas alguna llegadita en ataque pero muy poco participativo. Siempre da la impresión de que juega a otra cosa, pero para mal.
Guardado (5): El Aris jugó muy suelto por culpa de todo el equiopo bético, pero el especialista en dificultar las prestaciones del rival tiene algo más de responsabilidad que el resto en esa tarea colectiva de evitar que el rival rompiera líneas de forma tan facilona.
William Carvalho (4): Otro día en la oficina, pero de mucha máquina de café y charlas en los pasillos. Muy frío. Ya sabemos que nunca fue un racial jugador, y que vive de su tremenda calidad, que en esta ocasión dosificó de manera muy rácana. Por eso es suplente para Pellegrini, por partidos jugados de esta forma tan pasota. A este futbolista hay que pedirle más para nota.
Abde (7): Le falta regularidad y seguridad en las muchas acciones que acomete, pero está claro que insiste y que genera mucho peligro y sobre todo inquietud en los enemigos. Justo que marcara.
Rodri (6): La primera mitad fue el hombre más chisposo y vertical del Betis. Está rápido. Es verdad que desapareció, como todo el mundo, en el tramo inicial de la segunda mitad que obligó a Pellegrini a hacer un triple cambio por la vía de emergencia.
Luiz Henrique (4): Da muchísima pena ver esa colección de cualidades individuales que posee el brasileño y que no le saca ni la mitad de la mitad del rendimiento que necesita su equipo y él si quiere ser alguien con verdadero prestigio y recorrido en el fútbol profesional.
Borja Iglesias (4): ¿Se puede meter un gol y no aprobar? Yo creía que no, pero sí, al menos a mi juicio, porque el Panda hizo casi todo mal, menos una buena finalización en la que tuvo talento. Pero no le da. Está muy mal.
Isco (8): Otra vez fue salir y el equipo empezar a funcionar. Está algo más que integrado. Para el recuerdo una genialidad para activar a Abde en su gol. Supo ver hasta el momento de darle el penalti a Fekir para redondear una noche que no podía ser más que feliz. No siempre los planes bien trazados salen bien, pero esa no es su culpa.
Guido Rodriguez (5): Salió de medio centro para cambiar una tendencia mala de partido, y acabó de central, con los despistes casi lógicos de compartir además plaza con otro no central como Marc Roca.
Ayoze (5): Buenos detalles, fue de los que mejoraron al Betis en esos minutos ineperados por la pasividad ante un equipo del nivel de la Liga de Chipre.
Fekir (4): No suspende por fallar un penalti, aunque lógicamente no suma, pero se le vio muy cascado, a años luz del ritmo de élite.
Enrique (sc): Debut europeo para el joven medio centro sin más consideración porque tuvo poco balón.
Manuel Pellegrini (6): Hizo los cambios cuando debió, porque se estaba poniendo la cosa fea, y es verdad que se relajó antes de tiempo porque el gol del rival se debió entre otras cosas a esa decisión de juntar a Guido y Marc Roca como centrales así de repente.