La dificultad de subir la cláusula a Sarabia
El nuevo valor en alza de la plantilla sevillista tiene un muy buen sueldo, pero su libertad cuesta 'sól0' 18 millones
Redacción 30/10/2017 |
Pongamos las cosas en su sitio porque tampoco hay prisa, pero como ya adelantamos hace unos meses, una vez pasado todo el follón que genera el capítulo de altas y bajas de un club, especialmente en el Sevilla que siempre hay muchas novedades, el director deportivo Óscar Arias quería abordar la mejora y ampliación del contrato de Pablo Sarabia, porque el año pasado, con sus goles y asistencias, se lo ganó. La operación no es difícil, pero tampoco sencilla. Porque Sarabia es muy joven, aunque sea experto, no tiene más que 25 años, y es un jugador claramente de esos que salen revalorizados del Sevilla. Y como costó muy poco (350.000 euros), se le dejó una clásula relativamente baja (18 millones), pero un sueldo alto, precisamente porque su traspaso fue menor.
Esa combinación, sueldo alto y clásula baja, dificulta la negociación, en el sentido de que Sarabia, con contrato en vigor hasta 2020, tiene asegurado una nómina que sólo pueden pagar contados equipos y además la posibilidad de estar en el mercado (en Inglaterra su cláusula es 'calderilla') un poco con la sartén por el mango. Normalmente, los jugadores aceptan un aumento de cláusla con una buena subida de sueldo, algo que en el caso de Sarabia no es sencillo porque ya está a un buen nivel.
Lo bueno, para el Sevilla, es que el futbolista está en líneas generales muy bien en un club de altas aspiraciones y su salida, como en otros casos, sólo sería para un equipo top, por lo que con un aumento de sueldo (no puede ser muy grande porque lo gana bien), estaría dispuesto a subir esa cláusula que en estos tiempos puede ser baja, relativamente baja.