Las chicas del derbi
Blanca Manchón y la cantante Nya de la Rubia representan el pique sano entre Sevilla y Betis
José Antonio Jiménez 20/11/2013 |
Blanca Manchón es sin temor a equivocarnos una de las mejores deportistas que ha dado nuestra tierra. Pocas podrán presumir de un palmarés tan repleto de alegrías. Y eso que todavía le quedan años de sobra para seguir engordando su ya de por sí extenso curriculum vitae. Esta windsurfista nacida en Sevilla el 6 de marzo de 1987, que volverá a ser olímpica en Río de Janeiro (la Clase RS:X), pregona con orgullo algo que no se gana en el agua: Su impagable beticismo.
“Para mí, que vengo de una familia en la que la mayoría son béticos, el derbi es el partido del año. Desde pequeña en mi casa se vivía como algo especial y único. Mi padre y mi hermano son como yo, del Betis; y mi madre, la sevillista de la casa, la que la lía siempre. Cuando mi calendario me lo permite voy al estadio, ya que en mi familia son varios los abonados del club”, asegura Blanca sobre un equipo que, deportivamente hablando, no llega a la cita ante el eterno rival en las mejores condiciones.
Campeona del Mundo en 2010 y Diploma Olímpico en Atenas 2004, tira de memoria para hablar de esos recuerdos imborrables que una bética de pro nunca eliminará de su particular disco duro. “¿Mi primer recuerdo de un derbi? Era muy pequeña, pero me acuerdo del histórico 0-3 en el Ramón Sánchez Pizjuán con aquel golazo de Tomás Olías a Monchi y mi padre moviendo el sofá de los botes que pegaba. Ya más reciente el 1-0 con gol de Ricardo Oliveira que propició la clasificación para la Liga de Campeones en el histórico año que se ganó además la Copa del Rey (2005). Y cómo no, el último celebrado, con esa remontada y el gol de Nosa en el descuento tras dar el partido prácticamente por perdido después del descorazonador 0-3 de la primera media hora de juego”, rememora con orgullo la deportista. Vaticina que el duelo acabará “1-2” para los hombres de Pepe Mel.
Nya de la Rubia es una de las máximas exponentes del soul o del rap. No hace falta nacer en Estados Unidos para ello. Trianera de pura cepa, se está convirtiendo en la revelación de un mundillo tan castigado por la crisis. La artista del momento no esconde sus colores allá donde va.
"Ser sevillista o bética, siendo andaluza, es algo normal. Lo que no es muy común es ser anti algo en particular, como me ocurre a mí. De muy pequeña me encantaba jugar al fútbol y mi equipo era el Betis. Luego un familiar, que era socio del Sevilla, me llevó al Ramón Sánchez Pizjúan. Vi a esa afición súper volcada y me impresionó muchísimo. Me ganó. Me hice sevillista y no tarde demasiado en ser socia”, asegura esta voz privilegiada en ajetreadas semanas de promoción de su disco (tiene en unos días un concierto en Córdoba).
Bética de pequeñita, sevillista desde entonces y muy partidaria de ese particular pique sano existente entre los hinchas de ambas escuadras. “A los dos equipos de la ciudad les tengo cariño. A los dos, pero si hay un partido entre el Sevilla o el Betis me gusta que gane el Sevilla. Supongo que será por esos recuerdos que guardo de mis tiempos de socia (risas). Con los béticos me llevo genial, aunque siempre existe ese pique tan sano como divertido cuando el Sevilla derrota al Betis. Si es el Betis el que termina ganando, si se lo ha merecido, no queda otra que felicitarle”, rubrica antes de asegurar que el duelo del próximo domingo acabará “2-0” para las huestes de Unai Emery. Que así sea para los intereses nervionenses…